Grease, el musical de tu vida

Hace unos días fuimos a ver con unos amigos "Grease, el musical de tu vida" sin muchas referencias aunque la verdad es que por lo poco que había leído no tenía muchas expectativas.

Lo cierto es que esas impresiones se corroboraron y es que Grease es uno de esos musicales menores que cada vez más abundan en la cartelera. Sin duda este tipo de productos son necesarios y cubren un espacio del panorama, pero el peligro es que se acaben adueñando de toda la oferta... El público y el género se merecen y necesitan con mayor frecuencia obras de más calibre que atraigan espectadores en masa y consoliden la oferta cultural de Madrid. Hitos como el de Hoy no me puedo levantar no pueden quedar olvidados en el tiempo...

Grease es una sencilla adaptación de la película que se centra en los números musicales... La escenografía es mínima, dando a entender desde un principio el alcance de la obra... Los tramos hablados son meras excusas necesarias para pasar de una canción a otra... Ejemplo de ello son el guión, inconexo y forzado, y unas interpretaciones de muy poco nivel, entre las que destacan los dos protagonistas principales, especialmente desubicados.

Lo único aceptable son algunos números musicales amparados en los conocidos temas de la película y que aprovechan el despliegue de actores sobre el escenario para levantar el espectáculo...

En resumen, "Grease, el musical de tu vida" es apto para fanáticos de la película original o neófitos del género que sabrán perdonar todo lo malo, valorar los números musicales y regocijarse con las archiconocidas canciones que todos hemos bailado alguna vez... Lástima que no hayan aprovechado el tirón mediático de la película para plantear un espectáculo de mucho más nivel y repercusión.