La pasada temporada de series americanas ha traído muy pocos estrenos relevantes. Quizás uno de los más importantes ha sido The Good Wife, un drama legal producido por los hermanos Scott, Ridley y Tony, que ha sido bien acogido por crítica y público. Aprovechando el parón veraniego hemos decidido darle una oportunidad.
The Good Wife nos cuenta la historia de Alicia Florrick, esposa de Peter Florrick, antiguo fiscal del estado, aficionado a las prostitutas, que ha sido encarcelado por varios delitos. De ama de casa de un barrio elitista, Alicia vuelve a la ciudad y debe ponerse a trabajar para ganarse la vida y mantener a sus dos hijos. Gracias a un amigo de la Universidad encuentra un puesto de asociada junior en un bufete de abogados. A partir de aquí Alicia combina su labor en los juzgados con la tarea de tratar de salvar su matrimonio y familia.
The Good Wife es al fin y al cabo una historia de superación. Superación de una mujer engañada y humillada públicamente que no tiene tiempo de llorar por su cambio de vida lujosa ni por su traumática situación familiar. Superación de un día a día en un nuevo trabajo donde constantemente se enfrenta a la sombra de su marido.
Lo que puede parecer un drama legal más, otra vuelta de tuerca a un género tan manido como éste, emerge como una serie de gran nivel que se sustenta en la sorprendente Julianna Margulies, enorme, y un reparto compensado y eficaz.
The Good Wife es el triunfo de un guión trabajado, de una protagonista con la que empalizamos, de unos personajes completos que suman a la historia, que enriquecen el resultado. No dejéis de verla.