Uno de los estrenos del año! Watchmen estaba marcado como uno de esos momentos estelares en los que espectadores, crítica y medios generales esperan ansiosos... La adaptación para el cine del cómic del mismo nombre calificado como la gran obra maestra del género de superhéroes, un proyecto imposible para muchos al que sin embargo se atrevía el alabado director de la ya mítica 300, Zack Snyder.
Menos esperada y promocionada en España, Watchmen estaba señalada en el calendario estadounidense como el primero de los pesos pesados del año, ideal para el lanzamiento de numerosos trailers de lo que está por venir... La polémica por los derechos que llegó a amenazar su estreno no hizo sino acrecentar la expectación.
Watchmen nos cuenta la historia de un grupo de policías enmascarados convertidos en superhéroes para la sociedad aunque sin poderes reales. Famosos durante una época finalmente son criticados y relegados al ostracismo. Años después la muerte de uno de ellos la interpretan como el inicio de su eliminación sistemática y deciden investigarla en el marco de la amenaza de guerra nuclear entre Rusia y EEUU.
Hay dos formas de afrontar la película. Como conocedor y admirador del cómic o por el contrario como simple espectador que acude al cine a un gran estreno. Personalmente me incluyo en el segundo grupo. En esa tesitura, sin conocer el original, el proyecto se intuye harto complicado. Elogiable pues el trabajo de Snyder, que se encarga de recrear detalladamente las características estéticas de Watchmen. En lo negativo, la adaptación casi literal provoca una película desigual e irregular en la que ciertas tramas son prescindibles y con demasiados altibajos de intensidad.
Los actores cumplen aunque no del mismo modo. Destacan Jeffrey Den Morgan como El Comediante y Jackie Earle Haley, soberbio en su papel de Rorschar. Atractiva y sorprendente también Malin Akerman como Espectro de seda II.
En resumen, Snyder salva el reto de adaptar Watchmen con un buen resultado, una película correcta pero que decepciona por las expectativas creadas. La ambientación está lograda pero la puesta en escena queda lejos del aire cautivador y hechizante conseguido en 300. El guión demasiado ceñido al original exigía un mayor ajuste en su paso a la gran pantalla. El riesgo de crear una película rompedora y diferente, es no mantener el nivel en siguientes trabajos. Aún así no creo que se merezca la oleada de críticas recibidas.
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