Pedro Almodóvar es el referente de nuestro cine desde hace muchos años, algo indudable tanto para detractores como seguidores... únicamente Alejandro Amenábar ha conseguido hacer sombra en los últimos tiempos a este manchego irreverente que cautivara a medio mundo con Mujeres al borde de un ataque de nervios. Tras este éxito su insaciable creatividad e inquietud experimental le llevaron a continuar probando diferentes terrenos no siempre con el mismo resultado pero siempre manteniendo su reconocible sello personal. Todo sobre mi madre le reconcilió con crítica y público y dejó entrever detalles de lo que estaba por venir, pero fue Hable con ella la que, no sólo le trajo el Oscar por un genial guión, sino que marcó el inicio de una nueva etapa... Tras la irregular La mala educación, Volver reafirnó el rumbo...
En los abrazos rotos Almodóvar nos cuenta amores imposibles y pasiones irrefrenables... una historia marcada por la tragedia y el sufrimiento... pero más allá de todo eso da un paso adelante, dice adiós al surrealismo y da la bienvenida al color y a la estética, a la belleza de las imágenes, dando muestras de una sensibilidad al alcance de muy pocos... En ese camino sus mejores aliados son una estupenda banda sonora y un montaje que acierta en los cambios de época y en la reconstrucción del relato. Mención aparte para los planos cortos con los que nos acerca a los protagonistas y en especial a Penélope Cruz... encomiable el trabajo del director por mostrarnos a nuestra Pe más bella si cabe que en Volver... espléndida la sucesión de planos y escenas que realzan y magnifican su belleza... todo un deleite visual...
Respecto a las interpretaciones, soberbio Lluís Homar, confirmando el potencial que le sabíamos... Penélope cumple de forma notable dejando que el director la convierta en su icono... La nota negativa, Rubén Ochandiano, forzado en un personaje desdibujado...
En resumen, Los abrazos rotos consuman a Almodóvar como un director que apuesta por la belleza y sensibilidad, por un cine plástico en el que Penélope Cruz es buque insignia. Genial Lluís Homar. Sólo un guión imperfecto desluce mínimamente una película para deleite de los sentidos que no hace sino confirmar la madurez creativa del director... Nos os perdáis el guiño a tiempos pasados en la parte final de la película...
2 comentarios:
Mmmmm, buena pinta... pero me parece que esta es otra peli que no llegará a Singapur. Me tendré que conformar con la última de Jackie Chan jaja
Vaya, me imagino que allí la cartelera debe ser muy diferente!
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