Situación contraria a lo comentado sobre Bones hace unos días.
La longeva Anatomía de Grey, no es nada fácil llegar a las ocho temporadas, supo recuperar su esencia durante la T7 y en la T8 mantiene su buen nivel, entreteniendo, que es lo que importa.
Y cuál es su esencia? Dosis de historias personales, amores y desamores, casos médicos que sirven de excusa para enfrentar temas de médicos y residentes, y de vez en cuando, altas dosis de dramatismo médico, vamos, desgracias y accidentes varios, con los que elevar la intensidad del relato y coger impulso para los siguientes capítulos.
Lo dicho, en buena forma.
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